Colaborar, objetivo: empleo.
Favorecemos el proceso de inclusión de jóvenes desfavorecidos apoyando
procesos educativos de crecimiento y autonomía orientados a la inserción laboral.
Colaboramos
Los resultados
- Jóvenes formados
- Horas de formación
- Asignaturas de los cursos de formación
- Proyectos de inserción laboral creados
En colaboración con: Il laboratorio cooperativa sociale
EL DESAFÍO: el abandono escolar es un problema serio
En Italia, cada año muchísimos jóvenes abandonan sus estudios sin completarlos.
Una elección a menudo determinada por condiciones económicas o familiares difíciles, que repercute tanto en su presente como en su futuro.
Sin una educación adecuada y sin los recursos y los instrumentos para enfrentarse al mercado laboral, es difícil para estos muchachos encontrar un empleo. Esto les lleva a menudo a desarrollar inseguridades, depresión, falta de fe en el futuro y da pie a comportamientos antisociales y peligrosos e incluso, en ocasiones, criminales.
Es un precio que pagan individualmente, pero que se refleja en toda la sociedad, porque el efecto de estas desigualdades pone en riesgo la cohesión social e incide en el crecimiento económico total.
LOS OBJETIVOS: ayudarles a ganar seguridad, autonomía y competencias para favorecer la inclusión social
Colaboramos quiere combatir la marginación social de los jóvenes sin empleo y desfavorecidos proporcionándoles instrumentos para incrementar su crecimiento psicológico, emotivo y social. Al tiempo, les ayuda a crear estrategias para enfrentarse a las dificultades y superarlas.
El objetivo es apoyar la formación de 155 jóvenes de Génova procedentes de clases desfavorecidas poniendo en marcha prácticas de trabajo en varias empresas con el fin de lograr la inserción laboral.
NUESTRO PROYECTO: procesos individuales de orientación, formación y educación al trabajo
Desarrollar las competencias, mejorar la autoestima y poner en marcha una red de apoyo al servicio de quien más lo necesita.
El proyecto Colaboramos mira hacia el futuro de los jóvenes NINIS (ni estudian ni trabajan) en condiciones desfavorables, revalorizando sus capacidades y eliminando los obstáculos principales que les impiden realizarse en una profesión digna y calificada, y materializar sus aspiraciones.
Se realizó un seguimiento paso a paso de los jóvenes, de edades comprendidas entre los 16 y los 24 años, en un proceso de 24 meses.
Tras una primera fase que les permitió aprender una serie de competencias básicas de informática, lenguas extranjeras, seguridad en el trabajo, uso de las redes sociales y búsqueda concreta de empleo, el proceso de formación se dividió en tres cursos específicos de carácter técnico y profesional, dedicados al sector de la restauración, la artesanía y la innovación tecnológica de la impresión 3D.
Las prácticas laborales subsiguientes a la fase de formación les permitieron entrar en contacto directo con las empresas, y les dieron la oportunidad de medirse con el mercado laboral y tener una oportunidad de acceso a un empleo estable.
Los tutores específicos que siguieron su proceso formativo, los acompañaron también en la fase inicial de inserción laboral. Mantuvieron un estrecho contacto con las empresas para favorecer los procesos capaces de acreditar y potenciar las habilidades adquiridas por la persona en prácticas.
Todo ello mediante un enfoque centrado en dar valor a las competencias personales, que no se limitó a la inclusión sociolaboral, sino que insistió en el potencial de cada joven para aumentar su autoestima, favorecer la socialización y desarrollar en ellos un sentimiento de cooperación y solidaridad. Un enfoque que vuelve a aparecer en todos los proyectos dirigidos a NINIS y patrocinados por la Fundación, como “Senderismo para NINIS” y “Los caminos del mar”.